miércoles, 7 de noviembre de 2012


Todos somos de agua 
aunque no lo creas. 
Unos caemos en cascada y otros 
encuentran en la charca el remanso 
que les oculte y les de la calma. 
Nadie es menos por no salpicar gotas 
o llover hacia arriba. 
A veces la verdad es esdrújula, 
relativa,  huidiza, 
esquiva,  no ambigua,  siempre es agua. 
Somos lo que somos 
y pretender ser otra cosa 
es forzar voluntades 
¿No quieres la verdad? 
Pues mírala a los ojos, 
la tienes de cara. 



Nená de la Torriente