-Esta España nuestra-
una
España por cortejar
y
que se deje sincerar
con
vocablos viejos.
Bella, cada esquina, rincón,
vereda, laguna, lago, teja,
arboleda, caminuco de arena,
acceso
de piedra.
Tascas, tabernas o mesones,
queso, chorizo, panes y
redoma
de vino.
No
importa por dónde empieces,
ni
dónde acabes.
Ni
si donde acabas empiezas
hasta
llegar a otro lugar.
Divino
encuentro.
El
beso más largo en el paisaje
más
complejo.
De
un Sur a un Norte o
de
un Norte a un Sur.
Con
un Este a Oeste,
cruzando
por un centro amplio
que
habla con un Dios más suyo.
Distinta
escala de colores,
y
tu mendrugo en la boca siempre lleno
de
maravillosas y únicas reconquistas.
-Cógete una mochila
y recorre mundo-
Nená de la Torriente