domingo, 2 de septiembre de 2012


Tú eres mi poema, 
mi verso en la garganta 
anudado al alba 
aún opaca y muda. 
Invertebrada es esta mano 
de tinta, 
como seca está esta lengua 
hecha de letras, 
que te besa sin rozar tu labio, 
y que te extraña 
con su imposible métrica. 

Tú eres mi canto, 
mi nota de noctámbula luciérnaga, 
y mi cuerpo, 
este prado de trémulos cueros 
que se hace dibujo para ti, 
con margaritas de tela 
y ceniceros limpios. 

Y tú eres yo, 
cada vez que te asomas 
a mi mundo y leo tu nombre y tus 
apellidos,  y haces que aúlle a la luna, 
que reconozca tus ojos en la penumbra, 
y tu voz 
como el faro más cegador que existe. 



Nená de la Torriente

2 comentarios:

  1. no se puede leer
    poema más bello
    a las nueve

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  2. No se puede leer un comentario más agradable
    a cualquier hora del día.
    Beso,

    Nená

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