escucharte,
hay
muchas
bocas
delante
de
tu
boca
y
ni
siquiera
leo
tus
labios.
Siempre terminan
embrollándolo
todo.
Pero
es
i
g
n
o
r
a
n
c
i
a, no maldad.
Espero.
Nená de la
Torriente