Mírame
en tu cercanía
tan
frágil, tan despierta
a
tu boca,
y
tú tan lejos de las puertas
de
este cielo.
A
los ángeles se les da la mano
como a ángeles, no como a ramas secas.
Ese
roce rompe sus alas
de
aire, tan agitadas por los siglos,
tan
descreídas por otros hombres.
Si
bajé hasta la tierra
fue
para ser como tú,
no
para que me magulles
como
maltratan los hombres a las mujeres.
El
amor si es amor
es
lo más noble que existe,
porque
es una entrega sin condiciones.
-Lo
otro, lo otro es sólo deseo-
Nená de la Torriente