viernes, 1 de marzo de 2013


-Pucheros-

¡Y tú más 
y tú más 
y tú más! 

Repetía la creatura. 
Que a naide le gusta que le digan. 
Y el otro se encogía de hombros 
y decía: 
¡Que no soy tu enemigo! 

Pero es esa tortuosa manera de mirar 
las cosas,  levantar la primera hoja 
y hacerse cruces. 

Buscar el matiz o matices 
y darle forma de escudo,  yo no soy ese, 
por si cuela colando en una oreja 
que ya no escucha. 

¡Ay! 



Nená de la Torriente