jueves, 14 de marzo de 2013


Cuando me van los planos 
a ti te va la verticalidad,  y 
mira que siempre me he 
considerado oblicua. 
Ahora con los años a pesar 
de esa mínima tendencia 
del astigmatismo,  suelo tirar 
a la llanura, no por el dolor en las articulaciones,
sino porque me aburren 
los acertijos y jamás me agradaron 
las sorpresas. 
Quizá porque mi mente está demasiado 
desordenada dentro de un orden, 
o porque he conocido a demasiados 
idiotas, 
ya sabes de esos de la –b con la –a, 
-ba. 
Ahora me sobran kilos de tolerancia 
pero no de ceguera, 
que lo cortés,  no exime la condición 
de con quien eres considerado. 
Tú lo llamas hipocresía y en eso te equivocas. 
No les revoco el título ni les denomino 
en alto,  no soy su juez público. 
Les acepto con sus bellezas y sus horrores 
del mismo modo que me tolero a mí.




Nená de la Torriente