lunes, 14 de mayo de 2012


Sólo esto te ofrezco: 
Mi tiempo y una margarita. 

Despacio te doy 
cada pétalo de esta margarita. 
Tu tiempo es tuyo, siempre tuyo, 
yo te doy todo mi tiempo. 




Si me dices no,  me detengo, 
si es sí,  prosigo, 
y la sombra que proyecte el sol 
sobre tu iris 
la iré memorizando. 
Nada hay más increíble 
que el brillo cambiante 
de tus ojos tristes 
en incansable búsqueda. 



Nená de la Torriente

2 comentarios:

  1. Muchas gracias, Není. Por ser el primero me apropio de la margarita. Como si fuera una margarita de ida y vuelta. Haré volar a esa mariquita.

    Besucos.

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  2. Bien hecho, para ti se queda.
    Besucos,

    Není

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