Yo
sólo pedía un poco de fe
y
algo de espacio
en
cualquier mesa.
Buscaría
la flor y el búcaro
para
ponerla en el centro,
así
no haría falta
que
nos mirásemos a los ojos.
Todo
era sencillo,
burdamente
sencillo,
porque
el ser humano
va
buscando minas en la arena,
como
las burbujas del berberecho
y
no todo es tan complicado.
Estoy
cansada
¿lo
he dicho mucho, verdad?
Eso
no hace que deje de estarlo,
pero
es un suspiro más largo
que
me descansa más tiempo,
y
yo
soy
quien
sostiene
el
lapicero.
Nená
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Háblame