domingo, 15 de abril de 2012


De qué modo contarte 
que no soy más que arena, 
que sabe girar alrededor tuyo, 
colarme entre tus cosas, 
saltar cada vez que hables. 
De qué modo decirte, 
que el valor de mis diminutos 
granos,  es el movimiento 
que tú le imprimas. 
De qué manera confesarte, 
que no voy a abandonarte 
no tengas miedo. 
Podré caer a tu suelo 
y quedarme presa en la huella 
de tu zapato, 
regresar a tu suelo,  después 
a tu zapatilla,  alguna vez 
a tu pié desnudo 
y treparé,  despacio,  sin prisa. 
No sabrías desalojarme, 
y no podría incomodarte, 
mi diminuto grano es imperceptible, 
no hiero,  pero acompaño. 
De qué modo contarte 
que siempre voy a estar ahí. 






Nená

2 comentarios:

  1. NenÍ, casi ese dibujo se parece a la comunidad de Madrid.

    Granívora....

    Un besucazo.

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  2. Pues no me había fijado pero tienes toda la razón.
    Ñam,

    Není

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