Tantas
veces pasas por los mismos sitios
que
olvidas los diminutos espacios que
ocupan
las cosas.
Se
van alejando de tu mente como las
golondrinas
a anidar en otra parte.
Descubres
que no,
que
no defiendes un camino,
que
tu pasabas por allí
como
pasa el aire por los acantilados,
al
descuido,
sin
retener recuerdos.
Nená de la Torriente