miércoles, 5 de diciembre de 2012




Por una vez no diré lo que siento. 
¿A quién puede importarle esto? 
Por una vez no diré lo que pienso.  
¿A quién puede importarle esto? 
Por una vez no daré el abrazo ni el beso. 
¿A quién puede importarle esto? 
Por una vez tendré los ojos bien cerrados. 
A quién puede importarle esto 
si ni siquiera a mí me importa. 

La diferencia entre ser y estar, 
entre hacer y pensar 
es la que tú le concedas, 
y hay días,  muchos días 
para todo,
 para nada. 



Nená de la Torriente