Yo
veo el mundo verde.
Ana
ve el mundo azul turquesa.
Julio lo ve rojo intenso.
Silvia
lo ha visto siempre verde, azul
y
rojo.
Joan
ve el mundo naranja amanecer.
¿Cómo
hablarle a cada uno?
¿Cómo
entregarles todo el cariño
que
mi espacio ocupa
sin
que ellos le busquen algún propósito?
La
invidencia arrastra malentendidos
estúpidos
siempre.
Nená de la Torriente