-Pseudo hipo-
Amigo
mío, no tengas miedo
a
tener miedo, porque éste se entera
y
te toma,
y
por muy fuerte que tengas el anhelo,
y
precipites la carrera, intentará
retar
tu caída.
Somos
nuestros mayores traidores,
vamos
delatándonos a nosotros mismos
y
así no se puede ni echar una siesta
lejos
del desvelo.
Como
provocar a la impaciencia cuando
deseas
una vida plácida,
algo
tan natural como querer piernas largas
si
eres paticorto, o pelo lacio si lo tienes
ondulado.
Querido
amigo, no pienses que estás pensando,
sólo
razona,
que
si enredas la bambarria puede cambiar
hacia
un lado u otro.
Sonríe
y camina, sólo eso,
confía en estas palabras sencillas.
Nená de la Torriente