-RADIO.GRAMÍA-
No quiero nada
contigo.
No se me dan bien
las matemáticas,
tan sólo coso
palabras como mala costurera
arrimando hilos de
algodón con lana. Mírame bien, soy
un cofre pesado,
en esas
dimensiones que imaginas y en otras que tu cerebro en descanso no piensa.
Tengo un lenguaje
primigenio, casi de señales de humo,
por eso es tan
ilegible en esta era.
Entiendo el abrazo
en su dimensión exacta,
como entiendo el beso, el intenso cariño y
la preocupación idénticamente
punzante, porque
soy acento, no soy
mujer llana, también
esdrújula para mis cosas íntimas.
Si vienes a
buscarme siempre me encuentras,
nunca estoy de
lado, ni merodeo, ni me escondo,
no me gustan las
vanidades, ni las envidias, ni las frases
demasiado cortas
-les falta siempre
un hervor y un removido de cuchara-
Me gusta la gente
que me besa la mejilla y suena,
y que cuando
abraza no siente extrañeza,
aunque entiendo
que a todo hay que aprender
en esta vida.
Esto es lo que soy
por fuera.
Después todo se
anda si hay querencia.
-Sí, hablo mucho-
Nená de la Torriente