lunes, 23 de enero de 2012

POETAS

-Como siempre,  desde mi intimidad-

Hay algo que  a menudo pienso y muy a menudo repito,  que el poema y el poeta no son lo mismo.  ¿Por qué lo hago?  He conocido a muchos poetas,  y he acordado que prácticamente todos ellos juntaban letras, trataban de hacer algo bello,  comunicar con belleza los menos,  y los más,  sencillamente juntar armónicas palabras.  Pero a parte,  estaban las personas,  que no tenían nada que ver con aquellas letras que juntaban,  cosían o remataban.  La lógica es pensar que si alguien es capaz de escribir algo tan bello,  o tan exquisitamente sensible,  tiene que tener por sentido común una naturaleza con las mismas características,  y eso desgraciadamente no es así.  Son sólo modos aprendidos.  Es un arte.  Hay personas burdas,  necias,  obscenas,  egoístas,  con un talento extraordinario,  que han adquirido la sensibilidad necesaria en la palabra,  pero no en sus vidas.  Por eso el poeta no es su poema.  Yo suelo decir que no soy poeta,  porque la mayoría de poetas no me gustan,  no me gusta su pose,  no me gusta el carácter que imprimen a sus modales,  no me gusta el aire con que mueven sus manos,  ni quisiera pertenecer a ese submundo pertrechado que he conocido. 
Luego existen deliciosas personas brillantes,  sensibles, que además escriben poemas,  todo un hallazgo. Visto así casi no tiene mérito que sus poemas sean tan buenos,  es un suma y sigue,  está en su naturaleza.  Pero no,  tienen un don,  una capacidad innata para escribir,  y la sensibilidad necesaria para destacar.  Esas personas son sencillas,  porque son conscientes de que son afortunadas y no tocan el cielo con los dedos,  ni se sientan de lado en las sillas apurando un cigarrillo con cara de gilipuertas.  Asumen que de muchos modos van a ser queridas y van a ser odiadas,  entendidas y malentendidas,  pero bastará con que una sola persona que les lea sea capaz de tocar el cielo con los dedos,  para que todo lo que hayan escrito tenga sentido.




Nená

9 comentarios:

  1. Oh! Nená cuanto te entiendo. Yo también lo creo así, estoy tan asqueada de ese mundo ... cuando salgo y muestro lo que hago siempre después quiero botrarme y desaparecer no porque no fuera bueno, es que al día suguiente pienso que no lo necesito, no sé es un poco complicado.
    Un beso grande bella

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  2. Quizá sea tan sencillo como tu propia personalidad. Eres una persona sensible y lógica, y para soportar las memeces, y ese ambiente de te quiero pero te odio, estás pero ten cuidado de tu espalda, hay que tener un estómago muy distinto al tuyo.

    Eres una bella, que además escribe poemas, enhorabuena. Y suerte la mía por conocerte -aunque sea de este modo-.

    Un mua muy grande,


    Nená

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  3. suerte la mía!!! sé que estás en la isla del amor, eso si que es tener suerte :)
    un besazo

    nos queda mucha vida para conocernos

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  4. No te creas, no te creas. Llevo casi dos décadas, y aún se me mueven los pies. Pinos y mar, y suma insularidad y provincia. Aquí no hay una sólo escalera mecánica! Por cierto voy a Madrid el 26, este mismo jueves, a ver si nos podemos ver. Estaré unos cuantos días.

    Besos, preciosa.

    Nená

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  5. Me alegra Graciela que te gustase.

    Nená

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  6. Conocí un poeta yo llamado Leonardo, un poeta que sembraba, que hablaba lo justo, que amaba demasiado a sus judías. Para mí tiene que ver mucho el oficio de poeta con lo ocasional, con lo singular, siendo, además de poeta, persona que pisa el mundo, persona a la que las manos le sudan.
    Los gestos de las manos son más que relevantes: reveladores.

    Abrazos.

    http://tempero-koroneiki.blogspot.com/2008/05/quieren-girarme-para-que-las-mire.html

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  7. Y aunque de oficio fuera, la persona como tú dices Tempero,
    le sudan las manos, es un complejísimo universo.

    Beso,

    Nená

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