jueves, 16 de febrero de 2012


Vengo de la otra frontera 
de la cálida arena de Somo, 
con aromas de mar y verde 
arrimadas a la espalda, 
y en la frente un arco iris 
de más de siete colores. 

Llevo prendida en el pelo 
una bella sardina, 
con su dual reflejo, 
plata para las noches de luna, 
verde esmeralda matutino. 

Mi voz es un canto 
a kilómetros de distancia 
de mis prados, 
de la espiga dorada 
que habla de estíos 
a lomos de una moto, 
del brillo de unos ojos 
que se apagan
como dos cerillas,
y de ese olor a enigma 
y su eterno vagar a mi lado. 






Nená

2 comentarios:

  1. Las Quebrantas, el arenal de Somo, las dunas de Loredo, la playa de los Tranquilos, Nuestra señora de las Latas... Buen sitio, sí señora (perdón) para enmarcarse. Años ha mis piernas han corrido en frente, en ese mágico lugar de la península de la Magdalena en los cross que se hacían ahí.

    Me gusta la sardina que llevas en el pelo y su lance de plata.

    Abrazucos.

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  2. SI es una zona preciosa, y para correr estupenda, por ese aire tan limpio y el yodo -poco- que inhalas del mar.

    Nená

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