A veces lo que sostiene
es más hermoso que lo sostenido.
Él llevaba a la reina entre sus brazos,
pero él deslumbraba
mucho más que ella.
-Le cortaron la cabeza-
Aquel muchacho leyó el poema
de tal manera,
que lo de menos era el propio poema,
él fue quien otorgó belleza
a ese puñado de letras.
Ponemos lo segundo
detrás de lo primero,
por orden natural y deductivo,
pero esto no significa
que ser primero te dispense
gracias y disposiciones implícitas.
Del mismo modo,
el que porta algo
no es menos que lo portado,
pero sí a menudo menos apreciado.
Este pié de mesa me siseó
mientras comía.
-Me pasé parte de la cita recogiendo
servilletas-
Nená
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Háblame