sábado, 6 de abril de 2013



No te vengas abajo, 
el camino sin ti es sólo paisaje, 
eres el paso y el sonido del latido 
y la batería y el motor de arranque. 





Ese –a,  que anima a la verborrea plácida 
sin cervezas y a cantar como tenores 
con un par de muchas de ellas. 
Está todo por hacer. 
Calienta tu cama. 
Llena la nevera. 
Respira y 
sal a la calle 
a dar caña 
que no sea de azúcar. 



Nená de la Torriente