domingo, 16 de junio de 2013

POEMA 2.000

Esta pila de letras,
como los pilones de hierba amontonada
que con el rastrillo arrimábamos
desde las hileras secas,
hace el número dos mil.
Yo te escribo a ti
con la misma ilusión del primer día,
con la blusa desabrochada
de humanidad farragosa,
para que tú me la cuentes
cuando me leas,
para que al estar en tus ojos no se seque.
Ordénala por mí,
dala sentido en tu corazón,
en tus ojos de mundo,
en tu juicio distinto al mío.
Baila con ella, hazla tuya,
reléeme, y pronuncia con tu lengua
la locura de mis versos,
la cordura,
el precipicio inagotable de un día tras otro
regalándote poemas
hasta llegar a dos mil. 




Nená de la Torriente