jueves, 27 de junio de 2013

No me des un lugar 
dame una risa. 

Despierta las margaritas de mi pelo, 
el tambor de mi pecho y los violines 
que roban la humedad de las noches  
sobre el prado del norte. 



No me des un lugar, 
dame una nota, 
un espacio en un pentagrama sin tierra, 
sin papel,  sin línea,  sin surco, 
un sonido suspendido que esté esperando 
tu sonido. 
Un ramillete de soles al amanecer. 




Nená de la Torriente