DE CLI VE
Declive
es una palabra bonita,
es
una obra diminuta en tres actos.
Con
el –DE se presenta la obra,
y la lengua
saca
a los personajes
humanos
o animales.
Pero
en el –CLI la complicación
hace
de ellos un pequeño galimatías,
el
giro de una batidora,
un guiño de la sinhueso.
Y
llega el desenlace, una –VE sopladora
como
un suspiro aliviado,
que seguro concluye en palabra de amor
o
en necesaria despedida.