-Otra cara de las cosas…-
Y
todos se movieron airados,
cargaban
con pancartas y gritaban
exabruptos, a cada cual más chirriante.
Era
verdaderamente liberador.
Una
pequeña se acercó y preguntó
“¿Por
qué protestan hoy?”
“¡Ah
eso no lo sé!”
“Y
¿qué hay que hacer?”
Le dijo.
“Tú
sigue a la hormiga más gorda.”
Nená de la Torriente