-CREER-
Un
día comprendes que creer
no
es tan complicado.
Un
poco de anhelo,
huecos
despejados,
penuria
de cariño,
la
imagen de un gorrión
con
el ala rota
y
esa perspectiva de que
el
último punto del plano
es
un principio.
Cuando
era niña,
nada
había más rico que el agua
fría
bebida en la tapa de una lechera.
Metía
los dedos en los agujeros laterales
y
la llenaba en la fuente,
estaba
helada
-yo
creía que era curativa-
Se
necesita muy poco
para
sostener una idea
que
imaginas, que supones,
que
confías que es cierta.
Aún
cuando tienes todas
las
cartas en contra,
sigues
apostando confiado,
y
esa actitud a veces te lleva a la ruina
pero
otras te lleva al fin del mundo.
Nená de la Torriente