jueves, 28 de noviembre de 2013

-Chulona mía-


Tú que pisas por donde piso,
y yo que he pisado por donde pisaste ayer 
somos los nobles de esta magnífica ciudad. 








Yo que miro hacia arriba -como todos los que 
llevamos tiempo fuera- 
fascinada con las formas que rozan el cielo, 
y tú que miras al suelo,  sabiendo cómo salvar
las catalinas, 
somos la nobleza de esta ciudad. 

Él acurrucado en cartones,  y ella ebria de tinto 
en cartulina,  sentada en unos sucios escalones, 
son sus altezas en esta ciudad. 

Ellos arrimando codos gastados,  chato a chato 
sumando averías,  
una risa seca y tres achispadas, 
son sus excelencias en esta ciudad. 

Por eso Madrid es diferente,  distinta en credo 
y en estamento,  estrato,  cuerpo,  o categoría, 
Madrid es nuestra,  lamida a lamida, 
calle,  rotonda y avenida. 

Le dice ¡ay ven! Al que le rinde, 
y al oído o a las tripas: 
Soy tuya,  quédate más! 





Nená de la Torriente