Soy
la que salió del yeso
de
una pared para hacerse sábana.
La
que vino del viento, y la humedad
la
convirtió en vino.
La
que salió de una llama y engendró
a
toda una tribu.
Soy
la palabra que compuso el texto,
el
texto que lleno el mundo de ideas
revolucionarias.
Soy
el amor de los hombres y las hembras
que
alcanzó otro amor intocable.
Soy
el roce escalofrío,
el
roce añil aniñado,
el
roce animal herido, y
el
roce sangriento y prohibido.
Soy
la que está ahora encima de ti,
antes
detrás,
y dentro,
muy
dentro de ti mañana.
Nená de la Torriente