miércoles, 16 de octubre de 2013

-El derecho a-

Este libro vivo decidió 
no llamarse blog. 
Defendió su derecho a llamarse así: 
L I B R O 

Por parir hijos cada día, publicarse sólo, 
llenarse de ojos y posarse en las manos 
de muchos,  escribiéndose día a día 
sin volver atrás, 
buscando un fin inatisbable. 


Alguien le dijo que no lo era, 
pero ignoró su voz como 
quien ignora la brisa 
en una tarde de sábado 
dentro de una sala de baile. 





Nená de la Torriente