miércoles, 7 de septiembre de 2011


Te conviertes en silueta
un día sin fecha, y pasan los años
sin que puedas querellarte
contra ti mismo.


Eso he querido contarte
muchas veces, querido amigo,
que somos sombras que se desvanecen,
que odiamos mirar hacia atrás
porque reconquistarse
es un guiño imposible.
Somos otros, diferentes
a lo que fuimos.
Un poco de brillo en los ojos,
un matiz, recuerdos,
todo lo tierno que raptamos
lo reconvertimos,
siempre para cambiar.
Y a ratos, cuando nos quedamos
a solas sentimos frío,
porque no sabemos muy bien
en quién nos hemos convertido.

Nená

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Háblame