martes, 30 de agosto de 2011


-Despacio-

Despacio, despacio.
Los deseos, los propósitos,
las ideas, los sentimientos que muerden el estómago,
pausadamente, no vayan a caer al precipicio
de las epístolas sin destino.
No corras, no conmines.
Hay más atemorizados que pueblan las aceras,
que arrojados que arrebatan directrices.
Nos puede el ímpetu, unos dicen que la raza
–los eternos optimistas-,
las ganas de vivir deprisa o de no perder el tiempo.
Pero el tiempo es un pastel mordido
que se hunde por distintos sitios
y de irregular manera.
Así que despacio, que el apremio y la impaciencia
no sea un problema, sino la cámara de un turista
que se contenta
hasta el fin de su ‘período vacacional’.

Nená

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Háblame