De
la mano,
oliendo juntos el azahar.
Como
un conjunto de ejes
que
nos seccionan en planos,
así
puedo verte,
y
girar como una vuelta de viento
con
ojos de mosca,
para
dividir la imagen en muchos más planos.
Me
pensarás deshumanizada
-como
un bichón negro-,
pero
es tanto el anhelo
de
esa presencia,
que
en esta ausencia el deleite
se
amplifica, y busco veneros
por
donde dilatar mis ansias.
Soy
más que una mosca que se anticipa
a
lo que sueño como ser humano que sueña,
y
curioseo e imagino, y
tengo
pasión por los planos axiales
y
por el intenso olor del azahar
regalándonos primavera.
Nená de la Torriente