miércoles, 6 de julio de 2011


-Breves como las
flores de almendro-

El peso de tu cuerpo
sobre mi cuerpo
me ha vencido,
hoy instalo mi tejado
sobre tu sexo,
traiciono mi sensatez.
                 ***
Ahora me dirás que en ti
llegará la medida
de las cosas
y yo te creeré,
como creo que aún
hay un prado para mí, y
una palabra exacta.

-Creo para descreer
cuando duermo-
                    ***
No me des motivos
para desarmarte
de un golpe,
ni razones
para conquistar poemas.
Ven y dame tus labios
sin pensar en el beso.
                     ***
Voy a arrimar
los versos despacio,
para que no me sometan.
Santificado sea
el dolor de los verbos,
cuando dibujan tu cuerpo
sobre el papel.
                      ***
Vengo desde ti
en otro tiempo,
a recordarte cómo se siega la hierba.
Vengo a darte pan mojado en leche,
en cucharón de madera.
                      ***
 Nená

2 comentarios:

  1. Jodó que poemón (lamento el vulgarismo, cualquier otro comentario quedaría tan vano despues de leerte)
    Beso

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