sábado, 20 de septiembre de 2014



Ya no decimos. 
El pasado se dibuja sin presencia 
en este futuro que teme pronunciarse. 



Atesoramos nubes que van pasando 
y a veces nos llueven con estrépito. 
También seca la lluvia 
pero no olvidamos el olor a barro caliente 
y a mixtura de pieles húmedas. 
Fuimos en alguna vida 
flor amartelada de algún insecto, 
y tal vez oruga 
y tal vez savia, 
pero no nos lo contamos 
por si creyéramos en algo más 
que este ahora hosco y silente. 
Ya no decimos. 



Nená de la Torriente