jueves, 30 de julio de 2015


Lo que hay de verdad en un temblor 
así será la semilla. 
El escapo, el beso lento primero,  
poco después largo 
que intimará dos lenguas 
en una sola laguna, 
sabiendo navegar sueños 
de velas inhiestas con vientos variables. 
Las promesas, hojas que irán cayendo 
en las estacionen amarillas, 
lentas o a tropel pero con dolor todas ellas. 
Las quimas, 
esperarán bordear los labios 
tantas veces como el calor del relámpago 
les venza o les empuje, 
serán las ganas de lucha 
que quedarán 
bajo tanta derrota o encima de ella, 
triunfando en la hoguera del sol de mediodía, 
donde la palabra Fin aún se desconoce. 

Alimentarás la tempestad 
pero el árbol seguirá creciendo. 



Nená de la Torriente

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Háblame