Íntimamente imperfecta
No sé por qué lloramos tanto
pero lo hacemos,
lavamos el espanto con agua
de un océano íntimo,
si
empre
en
Ole
aje.
Y es la línea del vértigo
de vernos tan a solas
en un puerto con esta única nao
-y sin murmullo de gaviotas-
lo que nos hace tan imperfectos.
Sé de dónde vengo
pero a menudo no sé hacia dónde voy,
porque suelo mirar hacia atrás
con ojos de pelusa inquieta
buscando una antigua muñeca.
No son tristes los días,
son lluviosos en esta llanura fértil
de añoranzas,
porque los sueños son sueños
y los necesito para seguir en pie
y no balancearme tanto.
Si tú vas a convertirte en mi sueño,
te aviso:
No pienso desprenderme de ti.
Nená de la Torriente
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Háblame